Rafael Mejía López, presidente de la SAC, dio cinco sugerencias para lograr ese propósito: Soluciones para cada productor, Asociatividad para procurar el acceso y garantizar su uso, Financiación para el pequeño, mediano y gran empresario, Cerrar la brecha entre máquinas y TIC y Asesoría especializada y buena oferta. ANÁLISIS.
Estudios elaborados por la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), el Ministerio de Agricultura y otras entidades públicas y privadas que trabajan por el desarrollo del sector, han demostrado el bajo nivel de mecanización que existe en el campo colombiano.
Esto se reafirmó con los resultados del Tercer Censo Nacional Agropecuario (2014), realizado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), donde se especificó que solo el 16% de las Unidades Productivas Agrícolas (UPA), tienen acceso a maquinaria para sus actividades.
De acuerdo con la SAC, el resultado es preocupante. Más, si al entrar al detalle, la mecanización está relacionada con la productividad del sector agropecuario y con condiciones sociales rurales, como nivel de acceso a tecnología, educación y otros servicios; políticas y financieras.
"Y es que mecanizar trae múltiples beneficios para el desarrollo agrícola. Por ejemplo, se reducen los costos de producción, aumenta la productividad, las labores son mucho más rápidas y el capital de trabajo se ve beneficiado porque puede dedicarse a trabajos más especializadas", dijo Rafael Mejía López, presidente de la SAC.
El dirigente gremial añadió que como avance del trabajo que viene desarrollando activamente la SAC, junto con representantes del Gobierno Nacional y empresa privada, como es el caso de Casa Toro, se han llegado a algunas conclusiones que serán la línea base para establecer la formulación de fundamentos de una propuesta de política que estimule la mecanización y renovación de la maquinaria.
1- Soluciones para cada productor
"En la actualidad la agricultura del mundo se hace en todas las escalas y así las empresas que hacen maquinaria lo hacen para toda clase de producción. En Colombia tenemos máquinas que se adaptan a toda actividad agrícola, a todo terreno, clima y necesidad que tengan los productores", aseguró Juan Manuel Villegas, gerente nacional de maquinaria agrícola de Casa Toro.
Para todos los presupuestos y trabajos, hay una máquina que se ajusta. Casa Toro, por ejemplo, tiene un portafolio delimitado para pequeños productores, medianos y grandes y se clasifican, también, según sus actividades: maíz y granos, hortalizas y papa, arroz, entre otros. Tal oferta hay que seguirla especializando para mecanizar adecuada y oportunamente a las empresas agrícolas.
2- Asociatividad para procurar el acceso y garantizar su uso
Rafael Mejía expresó que la Mesa de Trabajo de Mecanización Agrícola ha considerado fundamental la promoción de empresas de servicios agropecuarios bajo esquemas asociativos, pues son tan importantes como modelos individuales, ya que en ambos casos se requieren condiciones para la modernización y acceso a tecnología.
"A través de la asociatividad se podría tener mejores resultados en el caso de los pequeños productores que adquieren maquinaria a través de bancos administrados por los gobiernos locales, en los que se ha detectado la falta de continuidad en los programas, criterios poco claros en la asignación de sus servicios y bajos presupuestos de mantenimiento y operación", agregó.
Dijo que la mecanización a través de asociaciones de productores tiene más sentido, en la medida en que hay un interés de los asociados, pues usan estas máquinas en su actividad permanente y son veedores de la correcta utilización.
3- Financiación para el pequeño, mediano y gran empresario
El acceso al crédito es fundamental en el proceso de mecanización agrícola. Por esto la mesa de trabajo, ha estado evaluando el sistema de crédito que podría adecuarse a las necesidades de cada empresario: pequeño, mediano y grande, que quiera renovar o comprar maquinas. En este sentido, en los primeros acercamientos de la mesa, la asociatividad se propone como una opción acertada para promover el crédito en los pequeños productores y nuevos y reformados incentivos para la financiación de medianos y grandes.
4- Cerrar la brecha entre máquinas y TIC
En la ruta de construir el plan de acción para promover la mecanización agrícola en el país, la mesa de trabajo ha contemplado el uso de TIC, que contribuye a cerrar las brechas tecnológicas y de competitividad del sector agropecuario, en la medida en que facilitan la apropiación de los resultados de la innovación en maquinaria, equipos y sistemas de producción por parte del productor; aprovechando aplicaciones en aspectos como la educación, la asistencia técnica, el financiamiento, el desarrollo y oportunidades de mercados, entre otros aspectos.
5- Asesoría especializada y buena oferta
La política de mecanización agrícola para el país, debe contemplar la formación de empresas privadas proveedoras de servicios agropecuarios, que cuenten con maquinaria eficiente y realicen esfuerzos adicionales para transferir conocimiento. Esto lo realiza Casa Toro a través de Fomenta, una fundación que se dedica a la formación y transferencia de conocimiento y buenas prácticas alrededor del uso e implementación de maquinaria en el negocio agropecuario.
Para tal fin, el conocimiento de los asesores que acompañen estos procesos de apropiación de tecnología y uso de maquinaria, será un factor fundamental para que la mecanización vaya más allá de adquirir una máquina y se convierta en una decisión que permita disfrutar de todos los beneficios que pueda brindar: productividad, rentabilidad y sostenibilidad del negocio
Para el presidente de la SAC, "atender la demanda de alimentos en unos años, y el llamado a ser una de las despensas mundiales, según la FAO, requiere de una Política de Mecanización Agrícola contundente para la productividad del sector. A esto esperamos contribuir en el trabajo que actualmente adelantamos junto al Ministerio de Agricultura y entidades del sector privado afiliadas a la SAC".
Fuente: http://bit.ly/2bruMNG